Hebreos 12.1-2
1) Por tanto, también nosotros, que estamos rodeados de una multitud tan grande de testigos, despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante. 2) Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.
Preguntas para reflexionar, de contenido (C), de interpretación (I) de aplicación (A)
- En el sermón, se mencionaron tres posibles maneras de correr, ¿cuáles son?
- También se mencionaron tres consejos para volver a correr rápidamente, cuesta abajo. ¿Cuáles son?
- La “multitud de testigos” aparece en el capítulo 11 de Hebreos. ¿Quiénes son? ¿Por qué pensás que dice que estamos “rodeados” de ellos? (I)
- ¿De qué tenemos que despojarnos para poder correr? (C)
- En la vida diaria, ¿qué podría ser “lastre”? (I)
- ¿Qué podría ser lastre para el cristiano? (I)
- ¿Qué vas a hacer para despojarte de “lastre” y “pecado”? (A)
- ¿Qué vas a hacer para ser más perseverante? (A)
- ¿Cómo se describe a Jesús en el versículo 2? ¿Quién es, en cuanto a nuestra fe? ¿Qué significan ambos papeles?
- ¿Por qué se nos aconseja “fijar la mirada en Jesús?” ¿Cómo se relaciona esta frase con la metáfora de la carrera? (I)
- ¿Por qué Jesús pudo ser perseverante? (C/I)
- ¿Qué te enseña esto en cuanto a la perseverancia? (I/A)
- ¿Qué vamos a hacer para ser más perseverantes como Jesús? (A)
Pregunta rompehielo: ¿Cuál fue la carrera más rápida que corriste?
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