Los niños como bendición y como ejemplo. Algunos párrafos bíblicos citados: Salmos 127.3-5; Proverbios 22.6, Efesios 6.10ss , Salmo 128.3-4, Marcos 10.13-16, Efesios 5.1ss, 1 Pedro 1.14, Romanos 8.16-17, Lucas 15.11-32.
Los niños son una bendición del Señor; en los salmos 127 y 128 se consideran como “fruto” del vientre por un lado pero también como “flechas” que sirven para luchar a favor de Dios e incluso eventualmente para proteger a los padres. Así como se exigen fuerza para doblar un arco y destreza para apuntar las flechas, de la misma manera educar a un niño en el Señor requiere energía, paciencia y habilidad. Jesús quiere que los niños lleguen hasta Él y no debemos hacer nada para impedirlo. Por otro lado, como hijos de Dios, Él quiere que lo imitemos, así como los niños suelen imitar a sus papás. Dios nos adoptó como hijos por medio de nuestra muerte y resurrección con Jesús en el bautismo; siendo hijos obedientes, también llegaremos a ser coherederos con Él.
Preguntas de reflexión acerca de 1 Pedro 1.13-21. Contenido (C), Interpretación (ִI), Aplicación (A)
- Según este párrafo, ¿cuáles son algunas cualidaes que deben tener los hijos de Dios? (C)
- Si llamamos a Dios “Padre”, ¿cómo debemos vivir? (C)
- ¿De qué somos “rescatados”? (C)
- ¿Hasta qué punto tomás conciencia de haber sido “rescatado”? (I/A)
- ¿Cuánto tiempo fue planeado este “rescate”? (C) ¿Cuánta importancia tiene este hecho para vos? (I)
- ¿Debido a qué los lectores originales de 1 Pedro llegaron a creer Dios? (C)
- ¿Qué nos enseña esto acerca de la importancia de la resurrección de Jesús para nuestra vida? (I)
- ¿Qué aspecto de este pasaje te gustaría aplicar en tu propia vida? (A)
Posible pregunta rompehielo:
Contá al grupo un ejemplo de algo que de niño/a aprendiste de tu mamá o tu papá.
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