¿Cuál es tu Refidím? Exodo 17.8-15.

(8) Los amalecitas vinieron a Refidín y atacaron a los israelitas. (9) Entonces Moisés le ordenó a Josué: «Escoge algunos de nuestros hombres y sal a combatir a los amalecitas. Mañana yo estaré en la cima de la colina con la vara de Dios en la mano.»
(10) Josué siguió las órdenes de Moisés y les presentó batalla a los amalecitas. Por su parte, Moisés, Aarón y Jur subieron a la cima de la colina. (11) Mientras Moisés mantenía los brazos en alto, la batalla se inclinaba en favor de los israelitas; pero cuando los bajaba, se inclinaba en favor de los amalecitas. (12) Cuando a Moisés se le cansaron los brazos, tomaron una piedra y se la pusieron debajo para que se sentara en ella; luego Aarón y Jur le sostuvieron los brazos, uno el izquierdo y otro el derecho, y así Moisés pudo mantenerlos firmes hasta la puesta del sol. (13) Fue así como Josué derrotó al ejército amalecita a filo de espada.
(14) Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: «Pon esto por escrito en un rollo de cuero, para que se recuerde, y que lo oiga bien Josué: Yo borraré por completo, bajo el cielo, todo rastro de los amalecitas
(15) Moisés edificó un altar y lo llamó «El SEÑOR es mi estandarte». Y exclamó:«¡Echa mano al estandarte del SEÑOR! ¡La guerra del SEÑOR contra Amalec será de generación en generación

En el desierto en Refidim los israelitas fueron atacados por los amalecitas. Los amalecitas en esta guerra llevaban todas las ventajas, ya que los israelitas eran una nación de esclavos y no estaban entrenados para pelear. Pero Moisés buscó al Señor como su “estandarte”, y esto es lo que le permitió a Israel salir victorioso. Un estandarte es una bandera que se levanta en la batalla; la frase “El Señor es mi estandarte” fue traducida antiguamente como “El Señor es mi refugio”.
La acción de Moisés de levantar los brazos a Dios muestra su constante dependencia en oración a lo largo de ese día para que el Señor estuviera interviniendo en la batalla. Sin embargo, esta fue solamente una batalla: la guerra seguiría “de generación en generación”. Israel continuaría venciendo sólo si seguía buscando al Señor. Todos tenemos problemas en que sólo Dios puede darnos la victoria; nuestras batallas también son continuas, e igual que Moisés necesitamos de hermanos que nos levanten los brazos, acompañándonos con su presencia y en oración.

Preguntas de reflexión. Contenido (C), Interpretación (I), Aplicación (A)

  • ¿Cómo se traducía antiguamente la palabra “estandarte”? (C)
  • ¿Por qué Moisés levantaba los brazos? (I)
  • ¿Cuál sería un Refidim que estás viviendo? (A)
  • ¿Cómo podemos levantarnos los brazos los unos a los otros? (I)
  • ¿En qué podríamos apoyarte en oración? (A)

Posible pregunta rompehielos

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