Algunos párrafos bíblicos citados: Juan 20.25-31, Juan 3.3-16, Romanos 1.1-3, Filipenses 2.3-11, Joel 2.27-32a, Hechos 2.17-31, 2.29-39, Apocalipsis 3.14, Apocalipsis 21.1 y 5-6, Isaías 65.16-17 (“el Dios del Amén” en la Biblia de Jerusalén crea un cielo nuevo y tierra nueva, como Dios en el Apocalipsis), Apocalipsis 1.17 “el que vive” (ver Génesis 16.14), Gálatas 3.26-27. La muerte y resurrección en Juan 20.25-31 son evidencia de que Él es Nuestro Señor y Nuestro Dios, el Cristo, el Hijo de Dios. Creyendo en Él tenemos la vida eterna, la cual comienza con un nuevo nacimiento.
Preguntas para la reflexión, de contenido (C), interpretación (I) o aplicación (A)
Leer Juan 20.25-31
- ¿Cómo respondió Tomás cuando vio a Jesús resucitado? (Juan 20.27-28) (C)
- ¿Cómo responderá toda la creación ante el señorío de Jesús según Filipenses 2.5-11? (C)
- Nosotros llegamos a ser “hijos de Dios” cuando nos revestimos de Jesús, el Hijo de Dios? ¿Cuándo sucede esto? (Gálatas 3.26-27, Hechos 2.38-39) (C)
- ¿En qué momento fue declarado “Señor” y “Cristo” Jesús (ver Hechos 2.22-24, 2.36)? (C)
- ¿Qué efecto produjo la muerte y resurrección de Jesús en el público que se enteró de esta buena nueva la primera vez que se anunció? (Hechos 2.37, 41) (C, I)
- ¿Qué efecto produce esta buena nueva en en vos? (A)
- ¿Qué poder actúa ahora en los que creemos que Cristo murió y resucitó para salvarnos según Efesios 1.17-20? ¿Qué puede hacer este poder según Efesios 3.20? (C)
- ¿Cómo estás experimentando el poder de la muerte y resurrección de Jesús en tu vida? (A)
- ¿Qué desearías pedir conforme a este poder? (A)
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